DOLORES

 

 

 

 

Dolores, Dolores.
Dolores, Dolores.
Al nacer sellaron tu destino
entre hojas de un olivo
y unos versos en calé.
Dolores, Dolores.
Cuentan los gitanos que de niña
ya habías sido prometida
sin saber quién era él.
Lo pactaron entre dos familias
y una era de Sevilla
y la otra de Jerez.
Tú fuiste creciendo entre los juncos
que tu abuela cosechaba,
la gitana churumbel.
Llegaron tus dieciocho años,
rompieron tu blanca rosa
pa dársela a Rafael.

Dolores, Dolores.
Reflejas la luna en tu mirada
y tu piel aceitunada
huele a romero y a miel.
Tu pelo revuelto por el viento
es tu lluvia y tu lamento
sin derechos de mujer.
Corre por la vega y por el río,
cargadita con su pena
y unas cestas que vender.
Llega al pueblo muy de madrugada,
desayuna junto a un árbol
pan con ajo y un café.

Dolores, Dolores.
Con su puesto cerca de la iglesia,
con su manto de colores
y en la cesta su bebé.
Llega a casa muy entrá la noche
y un perfume que le cuenta
que ahí ha estado otra con él.
Los vecinos, detrás de la puerta,
se lamentan por Dolores,
que ha matao a Rafael.

Dolores, Dolores.
Dolores, Dolores,
sin derechos de mujer.

Letra y música: J. L. Iglesias Martín.

Duración: 4,43 minutos.

Año de grabación: 1.991.

Album: ¡Qué bonita eres!

Indice del cancionero

Indice de la"D"