| |
De
mí quieres tú burlarte
con no decirme tu nombre.
Yo siempre te lo pregunto
pero tú nunca respondes.
Por esta pequeña cosa
no te tengo confianza.
A veces me dices Rosa,
y otras me dices Esperanza.
Tengo ojeras en la cara
y he perdido la alegría.
¿Serás Gloria o Virtudes,
Alma, Jacinta o María?
Sé que te llamas Preciosa,
con eso sobra, alma mía.
Sé
que te llamas Preciosa,
con eso sobra, alma mía.
Pero ya está bien,
que no me importa,
porque yo sin ti puedo pasar.
Sé que te llamas Preciosa
aunque tú digas Pilar.
Sé que te llamas
Preciosa
aunque tú digas Pilar.
Con la sonrisa en los labios,
siempre me miras riendo,
sin darte cuenta, chiquilla,
de lo que yo estoy sufriendo.
Aunque no sepa tu nombre,
siento una cosa tan rara
que yo siento escalofríos
cuando te miro a la cara.
A
todos voy preguntando
y así me paso los días.
¿Cómo se llama ese dulce
que a mí me amarga la vía?
Sé que te llamas
Preciosa,
con eso sobra, alma mía.
Sé que te llamas
Preciosa,
con eso sobra, alma mía.
Pero ya está bien.
Mira
chiquilla,
no me hagas hacer
más tonterías.
Sé que te llamas Preciosa
aunque tú digas Lucía.
Sé que te llamas Preciosa
aunque tú digas Lucía.
A
todos voy preguntando
y así me paso los días.
¿Cómo se llama ese dulce
que a mí me amarga la vía?
Sé
que te llamas Preciosa,
con eso sobra, alma mía.
Sé
que te llamas Preciosa,
con eso sobra, alma mía. Sé
que te llamas Preciosa,
con eso sobra, alma mía.
Sé
que te llamas Preciosa,
con eso sobra, alma mía...
|
|
